Carta del creador

Antonio Oya Casero

Cómo nace Fisyrec-Solidario

Fisyrec – Solidario nace con el objetivo prioritario de cubrir las necesidades de fisioterapia y rehabilitación de usuarios. La Carta del Creador explica cómo este proyecto busca ayudar a personas que necesitan estos servicios para curar patologías o mejorar su calidad de vida. Está enfocado en quienes, por diversos motivos, se encuentran en situaciones desfavorables y no pueden acceder económicamente a este tipo de atención.

Carta del creador

Quiero saludar a los que, de forma altruista y desinteresada, estáis colaborando en la clínica para dar acogida a este proyecto tan novedoso e innovador, en cuanto a solidaridad se refiere.

La Clínica de Fisioterapia de Antonio Oya, de la que soy gerente desde hace ya más de quince años, está formada por un grupo de profesionales que ofrece un servicio personalizado al paciente. Brindamos el tratamiento más adecuado a cada patología, aplicando las técnicas más novedosas y la tecnología más avanzada, para obtener una rápida recuperación.

A finales del año 2015, en mi labor diaria como fisioterapeuta y como personal sanitario, con una profunda vocación de ayuda a los demás, quise dar un paso más. Decidí acercar la fisioterapia a aquellas personas más desfavorecidas y sin recursos, para que también pudieran beneficiarse de las terapias de fisioterapia y rehabilitación que en esta consulta prestamos. Especialmente, estamos volcados con familias con hijos pequeños, personas mayores y con minusvalía. Fue entonces cuando surgió el proyecto Fisyrec – Solidario.

Aún es un proyecto en vías de desarrollo, pero en breve será una realidad. Personas podrán beneficiarse de mis servicios profesionales, mejorarán su calidad de vida, y yo me beneficiaré de la satisfacción de poder verlo hecho realidad. Quiero agradecer el trabajo que nos aporta la Asociación Proyecto Jaén Solidario, que nos deriva a los usuarios demandantes de nuestros servicios. Agradezco también toda vuestra colaboración, concretada en aportaciones alimenticias, materiales y en el apoyo, ánimo y ayuda como voluntarios en los diversos proyectos que desarrolláis.

A día de hoy, siguen siendo muchas las necesidades para que los proyectos sean viables y muchos los que luchan para que los colectivos dispongan de recursos y habilidades sociales. El objetivo es dotarles de suficientes herramientas que les permitan afrontar la vida con dignidad y encontrar su lugar en el mundo.

Agradezco también a las entidades privadas y públicas que hacen posible estos proyectos. Gracias a ellos, que están fuera de otras redes de ayudas, se pueden seguir adelante y cumplir la misión para la que se pusieron en marcha.

Han sido numerosas las acciones de diversos colectivos: colegios, centros juveniles, asociaciones y parroquias. A través de campañas y programas diversos, han ofrecido una ayuda inestimable.

A todos, nuestra gratitud y reconocimiento por vuestra valiosa aportación.

Estos proyectos no queremos que tengan fecha de caducidad mientras haya personas que necesiten recursos alimenticios y de servicios. Por ello, invitamos y animamos a seguir colaborando y dando más a quien menos tiene. La mejor forma de implementar los recursos es compartir lo que se hace, invitar a colaborar y animar a participar en lo que cada uno pueda o sepa hacer.

En mi nombre personal, como fundador del proyecto, y en nombre de todos los que formamos esta familia solidaria, agradezco vuestra generosidad y colaboración. Con afecto y gratitud,

Antonio Oya Casero.